Ciclomotor plegable y ecológico ‘made in UTS’
El sueño de cuatro estudiantes de las UTS es que el vehículo pueda ser tan popular como las llamadas ‘hoverboard’ o patinetas eléctricas. La idea nació de cuatros estudiantes del programa de Tecnología en Operación y Mantenimiento Electromecánico de las Unidades Tecnológicas de Santander, quienes decidieron presentar como proyecto de grado la fabricación de un ciclomotor plegable y ecológico. El proyecto se concretó y lo llamaron ‘Simot’. ‘Simot’ significa Solución Integral de Movilidad y Opción de Transporte. Sus creadores son los estudiantes Mario Alexánder López Pico, Michael Ortiz Malaver, Francisco Javier Almeida Rueda y Óscar Libardo García Porras, asesorados por el docente Aldrin Belisario Velosa Pacheco. Es un ciclomotor que funciona con cuatro baterías de 12 voltios, un motor brushless sin escobillas, sistema de frenos y lo novedoso es que se puede plegar, es decir, se puede doblar para que ocupe menos espacio. “Uno de los principales inconvenientes en el país son los lugares para estacionar los vehículos. Con ‘Simot’ cualquier persona puede ingresar a un área común ocupando menos espacio que una motocicleta”, manifestó Michael Ortiz, uno de sus creadores. No solo es plegable. La idea también es contribuir al Medio Ambiente y por eso el ciclomotor funciona con baterías que pueden ser recargadas en cualquier tomacorriente. Francisco Javier Almeida, otro de los estudiantes que trabajó en el diseño, aseguró que, “tiene integrado un cable normal para ser recargado. Tiene un recorrido de funcionamiento de hasta 40 kilómetros. Un tiempo de 3 a 4 horas y puede alcanzar una velocidad de hasta 30 kilómetros por hora. Pero la idea es recargarlo, no solo en la casa, sino mientras se está en el trabajo o en la universidad”. El primer prototipo de ‘Simot’ ya recorre las calles de Bucaramanga. Sus creadores, los cuatro estudiantes de las UTS, esperan perfeccionarlo ahora que inician una nueva etapa como aspirantes al título de ingenieros electromecánicos en las Unidades. “Al ser un prototipo tiene limitaciones, pero queremos mejorarlo. Vamos a seguir con este proyecto en las UTS y la idea es que sea una solución de movilidad y aportarle al planeta con la utilización de energías limpias”, manifestó Mario Alexánder Pico. En la actualidad ‘Simot’ no cuenta con un valor comercial, pero una vez concluya su etapa de perfeccionamiento podría tener un costo de más de $6 millones de pesos. El sueño de estos jóvenes estudiantes es crear su propia empresa y lograr que el ciclomotor se masifique con el sello de ‘made in UTS’. Publicado
27 de abril del 2016
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